Judith Franco Ainza
Hoy se cumplen tres años de que el Covid llegó a Sonora
Hoy se cumplen tres años de que la pandemia de Covid-19 llegó a Sonora, algo que inicialmente veíamos muy lejano y focalizado a miles de kilómetros de territorio sonorense, sin embargo, ha sido de las peores tragedias que ha enfrentado y continúa enfrentando la humanidad.
Y es que aunque parece que el virus ya desapareció, y así lo intentan ver muchos, la realidad es que continúa activo, tanto que a la fecha siguen ocurriendo casos, una menor está hospitalizada y lamentablemente las defunciones continúan.
Claro, con las jornadas de vacunación y a tres años de distancia es lógico que la intensidad haya disminuido, lo que deberíamos de mantener son las medidas preventivas, pero al parecer no aprendimos la lección y rápidamente caímos en los viejos hábitos de andar sin cubreboca, de no guardar la distancia y de las medidas higiénicas, ni hablamos.
De ahí que como han advertido los conocedores no es de extrañar que antes de lo que nos imaginamos tengamos que enfrentar otra pandemia, porque lamentablemente así somos los humanos, rápidamente dejamos de lado lo desagradable, es decir, pocas veces aprendemos la lección.
De acuerdo con cifras oficiales de la Secretaría de Salud desde que se reportó el primer caso de Covid, a la fecha suman 201 mil 417 casos y 10 mil 349 defunciones, la mayoría de las personas afectadas son del sexo femenino.
Sin embargo, de acuerdo con expertos existe una cifra negra de casos, que no está documentada que nos indica que fueron muchos más los casos y muchísimas más las muertes a causa de este virus que incluso llenó un panteón municipal a su máxima capacidad y tiene a punto de llenar el “nuevo”.
Recordamos con afecto a compañeros, colegas, amigos y familiares que se nos adelantaron en el camino a causa de este mal y rogamos porque al menos a esta generación y las próximas no les toque enfrentar una nueva pandemia.
Advierten por presencia de pirómanos causantes de incendios de maleza
Hace unas semanas comentábamos el intenso trabajo que realizan los elementos de bomberos en Hermosillo y supongo que otras latitudes es similar, con días en los que prácticamente no tienen ni cinco minutos de descanso entre un servicio y otro.
Aun así, hay quienes se resisten a pagar las aportaciones que se solicitan al tramitar placas o cumplir con ciertas contribuciones, sin saber que al igual que la Cruz Roja todos podemos utilizarlos en un momento dado.
Quienes por trabajo monitoreamos el trabajo que realizan nos sorprende la cantidad de incendios de maleza, viviendas, autos, fugas de gas, rescates de personas atrapadas en accidentes y hasta animales que auxilian a lo largo de sus jornadas, sin importar si llueve, hace frío o calor.
Para colmo, ahora ecologistas están advirtiendo de la presencia de uno o quien sabe cuántas personas sin oficio que se han dedicado a iniciar quemas en zonas de los cerros, de ahí que en las últimas semanas han abundado este tipo de siniestros en la ciudad, los cuales además de que dañan las zonas protegidas como las del Cerro Johnson y Bachoco, generan contaminación.
De ahí que los ecologistas están solicitando que se incremente la vigilancia en las zonas del cerro Johnson y Bachoco, para resguardar esas zonas.
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